Uno de los menores de edad detenidos la tarde del viernes por los funcionarios de la Policía del Estado Bolívar (PEB) adscritos a la Centro de Coordinación Policial (CCP) Guaiparo, en Venezuela, confesó haber violado a una pequeña de tan solo tres años de edad.
Asimismo se informó que el joven que decidió contar la verdad fue el de 13 años, precisando además que su compañero de 11 años, no participó en la transgresión contra la niña. Trascendió que el niño no ofreció detalles del por qué de su determinación por agredir sexualmente a la pequeña.
El presunto violador y el padre de la niña, serán presentados hoy ante el Ministerio Público, cada uno por separado. Cabe destacar que el progenitor de la pequeña también fue detenido por los funcionarios por haberle dado una golpiza al menor de edad.
El suceso
Los hechos transcurrieron el viernes en la comunidad Los Alacranes, frente a la iglesia San Francisco de Asís del sector III de San Félix. De acuerdo a la información narrada por Aracelis Hurtado, abuela de la niña, todo ocurrió en horas del mediodía cuando se disponían a almorzar.
Supuestamente la progenitora de la afectada identificada como Ruth Carreño estaba sirviendo la comida y sin darse cuenta la niña se salió de una de las piezas de la vivienda donde alquilan en dirección al lugar donde estaban los otros dos menores.
Ambos padres no se percataron de lo que había sucedido sino hasta el momento que escucharon gritos y llanto por parte de la pequeña, se presume de dolor por la agresión que le acababan de realizar.
Hurtado detalla que en ese momento Carreño le preguntaba a la pequeña qué había sucedido y la misma solo indicaba tener dolor en sus partes, mientras indicaba inocentemente “pupú”, por lo que rápidamente la madre la revisó y consiguió indicios de la atrocidad.
La sangre proveniente del recto de la infante hizo que Ruth pensara que su hija había sido violada por el par de niños y al preguntarles lo que había sucedido éstos ofrecieron su propia versión de los hechos.
Una segunda versión señalada desde la Brigada Hospitalaria indica que en el momento que la mujer acude al llamado de su bebé encuentra a uno de los menores subiéndole los “pantaloncitos” a la pequeña y es lo que la lleva a sospechar del ultraje.
Aunque esta versión no pudo ser confirmada por los familiares, será investigada por las autoridades pertinentes que ya se encuentran trabajando para evaluar las responsabilidades en el caso.
“Se cayó”
Por su parte, la supuesta versión ofrecida por los dos menores es que en efecto la pequeña llegó a jugar con ellos en el sitio y de un momento a otro se cayó enterrándose un objeto, ya que se desplomó encima de sus posaderas y esa sería la razón por la cual la menor sangraba.
Inmediatamente Carreño en compañía de su esposo Carlos Pérez llevó a su hija hasta la emergencia del Hospital Pediátrico Menca de Leoni de Guaiparo, donde ingresó presentando síntomas de una presunta violación.
Los galenos de guardia realizaron las curas correspondientes y se pudo conocer de manera extraoficial que el informe médico arrojó signos de desfloración en el recto, por lo que la investigación quedó en manos de los expertos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc).
Con información de Nueva Prensa
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