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| FOTO: Twitter @CarlosTejedaA |
Fue un intenso olor a azufre y amoniaco, entre otros olores pestilentes, los que la noche de ayer alertaron a vecinos del lugar, quienes informaron a las autoridades policiacas que éstos emanaban del inmueble ubicado en el número 88 de la calle Central, departamento F-128, en la citada colonia.
Al lugar arribaron socorristas de la Cruz Roja y del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas, así como uniformados de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal, quienes al ingresar al inmueble, se llevaron terrible sorpresa al encontrar un escenario de sangre, terror y muerte.
Se apreciaba un ambiente gélido y tenebroso en el que destacaba el culto a la santa muerte. Ahí, una de las habitaciones estaba salpicada de sangre, y con el mismo liquido hemático pintado un símbolo del “ojo que todo lo ve”, así como una estrella cabalística pintada en el piso.
En otra habitación estaban los cuerpos de los dos adultos, quienes fueron identificados como Zolomon Ayotete Solanque, de 36 años de edad, y Zainab Solanque Sunmi de 30 años de edad, los cueles son originarios de Nigeria, según la información de dos pasaportes encontrados en el lugar.
En otra de las habitaciones, sobre una cama estaban los cuerpos de los dos menores de entre 3 y cinco años de edad. Los pequeños tenían tapados los orificios nasales con algodón y se presume que los algodones fueron humedecidos con alguna “sustancia” que los llevó a que perdieran la vida.
Al descubrirse este escenario mortal en el que cuatro personas fallecieron durante lo que parece ser un ritual satánico, se solicitó la presencia de las autoridades ministeriales. Al lugar arribaron elementos periciales y agentes de la Policía de Investigación de la Procuraduría capitalina.
Tras realizar la inspección ocular y recoger toda evidencia que los lleve al esclarecimiento de este caso, el representante social ordenó el levantamiento y traslado de los cadáveres al anfiteatro. Las investigaciones correrán a cargo de personal de la Coordinación Territorial Iztacalco-2.
De acuerdo con los primeros reportes, las víctimas presentaban estado de descomposición, por lo que suponen que podrían tener 5 días de haber muerto. Hasta el momento, se desconoce la causa de los decesos, pero se cree que murieron envenenados al consumir “brebajes” durante el ritual.
Con información de La Policiaca
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